“Los Modelos ONU me ayudaron a construir mi mirada sobre la realidad, a formar mi pensamiento crítico”
En el Día Mundial de las Habilidades de la Juventud entrevistamos a Juan Manuel Fernández quien trabaja para que miles de jóvenes accedan a educación de calidad
Juan Manuel es hoy el Director Ejecutivo de Asociación Conciencia, una de las organizaciones sin fines de lucro más influyentes de la República Argentina, que trabaja desde 1982 brindando herramientas para educar y formar a los ciudadanos, forjar sus capacidades para la inserción laboral, promover el voluntariado y a su vez fomentar la interrelación entre empresas, el Estado y organizaciones de la sociedad civil.
Entre las decenas de programas que lleva adelante Conciencia, se encuentra “Uniendo Metas”, que hace posible que el Modelo de Naciones Unidas, llegue a dieciocho destinos alrededor del país generando la participación de más de 15.000 estudiantes tanto en regiones urbanas como rurales con escasez de recursos y accesos. Fue hace 20 años atrás, que siendo alumno de tercer año de una escuela industrial, que había elegido para seguir los pasos de su padre, Juan Manuel con mucha curiosidad decidió unirse a uno de los Modelos ONU que organizaba Conciencia. Ese sería su primer contacto con la organización que hoy tiene el orgullo de liderar, y a su vez el inicio de una pasión que año a año le fue indicando la ruta de su carrera.
“Cuando llegué a tercer año, yo tenía una profesora de Geografía, Alicia, a quien quiero mucho y hoy aún conservo el vínculo, le comuniqué mis ganas de participar del Modelo ONU, así comienza mi historia con los Modelos que continua hasta el día de hoy como parte de mi vida. A medida que me fui involucrando en los Modelos empecé a poder construir mi mirada sobre la realidad, fomentar consensos, aceptar disensos formando un pensamiento crítico, aprendí a formar mi oralidad y a relacionarme con chicos de otras escuelas.”
Juan Manuel hizo referencia, además, a cómo nada interfería en esa motivación que le provocaba anualmente perfeccionarse para sus intervenciones en los simulacros, recordó cómo se levantaba muy temprano los sábados para tomarse el colectivo en pleno invierno para concurrir a las capacitaciones. Ese esfuerzo dio sus frutos evidentes, luego de varias experiencias como miembro de delegaciones, continuó siendo autoridad de las mismas, posteriormente voluntario en sus tiempos de universitario, para luego integrar el comité organizador en Asociación Conciencia.
“Participar en los Modelos ONU fue determinante para el diseño de mi proyecto de vida porque cuando estaba llegando a mi último año de secundario me di cuenta que la carrera industrial no era para mí, no estaba disfrutando la orientación técnica, disfrutaba cuando iba a los Modelos, los docentes mismos me ayudaron a comprenderlo, ya que era muy notorio como vibraba cuando participaba en ellos, cuando conectaba con materias más relacionadas con la formación humanística. Así fue que me incliné por la carrera de abogacía y el hecho de descubrir quien realmente quería ser tuvo que ver directamente con los Modelos de Naciones Unidas”, aseguró el actual Director Ejecutivo de Conciencia.
Seguramente ese fervor y esa gratitud con los principios de la organización fueron los que llevaron a Juan Manuel y a su mujer a que su primer viaje al exterior fuese a la ciudad de Nueva York, con el foco puesto en visitar la sede de las Naciones Unidas, momento que recuerda como inolvidable.
A pesar del desarrollo tecnológico y la virtualidad, los debates presenciales en los Modelos ONU siguen cautivando a las nuevas generaciones
En un mundo en el cual la tecnología parece dominar el interés de la juventud, increíblemente los Modelos ONU continúan siendo un espacio atractivo y de formación de habilidades para las y los jóvenes que elijen representar delegaciones. “Estuve la semana pasada presenciando las capacitaciones que se llevan a cabo en la Universidad Católica Argentina para quienes participan de los Modelos de Asociación Conciencia en la Ciudad de Buenos Aires, y percibí la misma energía que hace veinte años, ver que tanto alumnos del ámbito privado como del público estaban tan entusiasmados, creo que tiene un enorme significado. Creo que lo que tiene de mágico el Modelo ONU como dinámica es que rompe la estructura tan rígida que tiene la escolaridad en Argentina, dialoga mucho mejor con el concepto aula taller, a través del juego de roles, involucra al alumnado en una tarea concreta, les permite investigar libremente, les permite construir consensos, respetar la mirada del otro. Es una dinámica que tiene una vigencia sorprendente en el siglo XXI, porque permite la construcción del concepto de ciudadano mundial”, enfatizó.
Apoyar la búsqueda de la educación de calidad en Argentina
La educación y la formación de ciudadanos son los pilares de Asociación Conciencia, motivo por el cual Juan Manuel expresó: “Este año nos propusimos desde Conciencia un objetivo muy claro y concreto en términos institucionales que es insistir en que la educación este en un lugar muy prioritario en la agenda pública. Estamos convencidos que la única forma de resolver la situación de la crisis educativa en la cual vivimos es con acuerdos entre el Estado Nacional, las provincias, la sociedad civil, la escuela. Requiere de un esfuerzo mancomunado con una hoja de ruta bien clara.
Luego detalló concretamente el trabajo de la asociación y el compromiso que demuestran con proyectos tangibles que repercuten en el crecimiento de las nuevas generaciones argentinas: “Nosotros hacemos nuestra parte como parte de la sociedad civil, incidencia pública en sostenerla en agenda y diseñar programas que reviertan la situación en la que estamos. Hoy nosotros estamos trabajando muy fuertemente en la terminalidad, tenemos 2500 alumnos de nivel inicial, primario, secundario y superior que estamos acompañando no solamente con becas sino también con tutorías, porque está demostrado que el principal factor de abandono no es el componente económico, y además está demostrado que una buena tutoría incluso remota permite reducir significativamente los tiempos de aprendizaje de operaciones matemáticas y de lecto comprensión.
También tenemos otra línea programática para mejorías en el último ciclo de escuela secundaria, brindando herramientas de acceso al mundo del trabajo, que tiene que ver principalmente con la formación para poder enfrentar una entrevista laboral, poder construir un curriculum vitae, dar instancias de formación complementaria como programación, robótica, o educación financiera.”
Además, Juan Manuel describió un trabajo muy fuerte con un programa que realizan en zonas rurales, que tiene un diagnóstico de acceso a derechos integral, con acompañamiento educativo y hasta sanitario. En este momento están realizando una investigación para evaluar los calendarios de ciertas cadenas de producción en ciertas regiones de la Argentina: “Hay ciertas cadenas productivas que son intensivas en cuanto a demanda laboral en momentos en los cuales la escuela esta cerrada por vacaciones, eso provoca que niñas y niños se queden sin un responsable a su cuidado, o que en los últimos años de la escuela secundaria, como sucede en las plantaciones de arándanos en Tucumán, los jóvenes sean requeridos para la cosecha y no regresen a la escuela porque la familia ya cuenta con un ingreso más. Tal vez hay que repensar la adaptación a la estructura de calendario escolar en algunas regiones.”
¿Qué habilidades necesita desarrollar hoy la juventud para insertarse laboralmente en un mercado tan competitivo?
Más allá de los conocimientos tecnológicos que hacen a la alfabetización digital y que si duda son cada vez más indispensables para ser considerado un candidato elegible en el mercado laboral actual, hay ciertas habilidades y atributos que no brindan los dispositivos electrónicos y que también hacen la diferencia de la persona en un entorno laboral eficiente.
En seguimiento a está premisa Juan Manuel aseguró que: “Siento que la creatividad ha ganado posiciones destacadas al momento de a búsqueda de un perfil para un puesto laboral, y tenemos que estimular más la creatividad en las y los jóvenes. Por otro lado, creo que nosotros tenemos que trabajar más fuerte en que la juventud pueda ser más consciente de su propia responsabilidad en el diseño de su proyecto de vida, y la única forma de hacerlo es darles cada vez más herramientas, por ejemplo plantearnos como ofrecerles propuestas pedagógicas más atractivas. Ayudarlos a aprender a combatir las noticias falsas, a que sepan identificar fuentes fidedignas de la desinformación, eso también fortalece su carácter, sus habilidades.”
Finalmente, Juan Manuel reflexionó sobre su carrera, la elección de su camino, y el esfuerzo y la perseverancia que acompañados de su formación lo llevaron a ocupar este importante rol en la sociedad con tan solo 35 años, y recordó: “En una charla que mantuve el otro día, en el encuentro anual de Asociación Conciencia con Claudia Mojica, la Coordinadora Residente de la ONU en Argentina y Tamar Hahn, la Directora del Centro de Información de la ONU para Argentina y Uruguay, les comenté que la vida hoy me encuentra veinte años después de mi primera participación en un Modelo ONU dirigiendo Asociación Conciencia, la organización que a mí me cambió la vida. Eso implica no solo una responsabilidad enorme, sino también un desafío que me encanta.”